Por: Andia Medina
La primera vez que «juegas» es entretenido pero la segunda vez es ‘mind blowing’.
‘Black Mirror: Bandersnatch’ es una película interactiva transmitida por Netflix. En la misma puedes escoger las decisiones del personaje para tener diferentes progresos en la historia. La cual se basa a mediado de la década de los 80, 1984 para ser más exacto, donde un programador comienza a cuestionarse sobre la realidad al momento de que trata de contar una historia de fantasía y temáticas «oscuras», adaptándola en forma de un video juego.
Los creadores de la serie de origen británica, se lucen al regresar con este filme, el cual te lleva en un «viaje» lleno de obstáculos y decisiones que quizás para ti sean correctas, pero para el personaje resulten en un desenlace completamente diferente. Con referencias a sus pasados episodios y un dialogo «juguetón» se mantiene al espectador o «jugador» activo y pendiente a cada detalle que pudiera ocurrir. Este largometraje posee la habilidad de hacerte pensar que quizás la única manera de terminar la historia sea con un final abierto o con más preguntas que respuestas. Will Poulter como Colin Ritman, se «bota» con su diálogo o más bien con su monólogo con cual te ayuda a entender el desarrollo del personaje, haciéndote entender lo que ya pasó y básicamente explicándote lo que está por pasar.
En lo personal me gusta la parte interactiva de la película, ya que «Black Mirror» es una serie que resalta y comenta mucho sobre teorías de conspiración, al igual que te expone el mundo de la tecnología con su twist dark. Se puede apreciar el trabajo que se llevó acabo, en la manera que tomas las decisiones. La manera que ellos logran cautivar e incluso ponerte a dudar de tus propias respuestas, hace que te pongas en los zapatos del personaje. Si eres fanático de Black Mirror te encantará, pero si eres nuevo a este mundo, esta película te hará ver las cosas de otra manera.